Origen y filosofía
El crossfit nace como una marca registrada que propone un sistema de entrenamiento basado en movimientos funcionales, realizados a alta intensidad y con una gran variedad de ejercicios. Su objetivo es mejorar las 10 capacidades físicas generales del cuerpo.
El entrenamiento híbrido no sigue una metodología única ni tiene una marca detrás. Es un enfoque más flexible que busca combinar fuerza y cardio de forma equilibrada. Se puede adaptar a distintos deportes o simplemente a objetivos personales de salud y rendimiento.
Tipo de entrenamiento
En crossfit, los entrenamientos están organizados en sesiones estructuradas con nombres propios (WODs) que incluyen levantamientos olímpicos, ejercicios gimnásticos y cardio, todo en un mismo día. Se prioriza la intensidad y la variedad.
En el entrenamiento híbrido, los componentes suelen separarse más: un día se trabaja fuerza, otro cardio, o se hacen sesiones combinadas, pero con una planificación más progresiva y enfocada en el equilibrio entre ambos estímulos.
Para quién es cada uno
- Crossfit: Atrae a personas que disfrutan de entrenamientos exigentes, del ambiente competitivo y del trabajo en grupo. Requiere técnica y adaptación progresiva.
- Entrenamiento híbrido: Es más accesible para principiantes o personas que quieren mejorar su forma física sin necesidad de competir ni seguir una programación cerrada.
¿Se pueden combinar?
Sí. Muchas personas combinan elementos de ambos enfoques. Por ejemplo, un atleta puede seguir una planificación híbrida y hacer sesiones puntuales de crossfit como entrenamiento variado. Lo importante es entender qué aporta cada uno y adaptar el volumen e intensidad a las capacidades del cuerpo.